Este trágico suceso nos conduce a Salta, Argentina, donde unos estudiante estaban festejando el fin de curso y en la escalinata del monumento a Gemes, procedieron a encender una torta de fuegos artificiales.
Nuestro triste protagonista, el perro Malevo, se asustó y después de haber sido lanzados 7 u 8 petardos, se abalanzó sobre la torta de fuegos artificiales y mordió uno de los petardos explotando en la mandíbula del animal y destrozándole el hocico.
Su dueño desesperado, se arrojó encima del perrito miestras este se desangraba en el suelo. Fué una escena verdaderamente triste. Su joven dueño no dejaba de llorar. Había sacado a pasear tranquilamente a su mascota y ahora estaba muerto.
Cabe destacar que nadie hizo nada por el pobre animal ni por su dueño. Nadie se acercó ni intentó auxiliar al animal, a pesar de que la zona estaba llena de estudiantes, profesores y padres.
El departamento de prensa de la Policía declaró oficialmente que «hay grabaciones que están a disposición de la Justicia y se está esperando el examen que se le está realizando al animal. Se debe decir que tenemos a todos identificados. Hay menores de ocho cursos de secundario y varios padres también. Cuando tengamos los resultados de la autopsia, se elevará toda la información a la Justicia para que decida qué pasos seguir».
¿Que opinas acerca de los petardos y fuegos artificiales en manos de no profesionales?
Pon tu comentario.