Según la legislación vigente en Salamanca, los ladridos de los perros no pueden superar los 20,6 decibelios para cumplir con la Ordenanza vigente.

El caso que os ocupa ocurrió en la calle Petunias de dicha localidad, donde el 18 de enero fue denunciada la propietaria del perro en cuestión ya que su perro estaba ladrando constantemente y con un volumen de ladrido muy alto. Esta denuncia supuso una multa de 300 euros.

El volumen de los ladridos del perro alcanzaron los 28,1 decibelios, estando claramente por encima de los 20,6 máximo permitidos.

No es la primera vez que este perro es denunciado ya que el 29 de diciembre del año pasado, los vecinos llamaron a los agentes del orden a las cinco de la madrugada debido a que el perro no dejaba de ladrar con un volumen muy alto y no podían conciliar el sueño.

En esa ocasión, los ladridos tambien superaron el máximo permitido y V. S. G. recibió la denuncia estipulada para estos casos.

Aunque la fuente de la noticia no lo aclara, nosotros suponemos que el perro estaba solo en casa.

¿Que haces tu si tu perro no deja de ladrar? ¿Tienes algún truco mágico para tranquilizarlo y que llegue a callar?.

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