Hoy vamos a tratar de uno de los temas que suelen traer cierta discrepancias cuando se produce la separación o divorcio de una pareja: la custodia compartida de los perros o mascotas en general.
El tema más difícil de gestionar en una separación siempre son los hijos, por razones obvias y luego también están los temas materiales que suelen ser más fáciles de abordar y llegar un acuerdo por ambas partes.
Custodia Compartida para los Perros
El hecho de compartir perro durante el matrimonio o vida en pareja trae el problema de que hacer con las mascotas en caso de divorcio ya que los perros como los hijos también generan un problema emocional.
Antes de meternos en abogados para custodia de perros, es preferible llegar a un acuerdo cordial y compartir de forma pactada la custodia del perro por semanas, quincenas o meses. De esta forma, nuestro perro podrá disfrutar de sus dos dueños y estos a la vez disfrutarán de él. Ten en cuenta que tu perro no entiende de divorcios.
Pero, ¿Qué ocurre si no hay acuerdo y uno de los dos decide quedarse al animal sin dejar al otro ni siquiera acercarse?
Estudiamos un caso que ocurrió a una vecina de Linares. Su ex novio decidió incondicionalmente quedarse con el perro cuando se produjo la separación y no dio ninguna oportunidad a nuestra protagonista de ver al amado can.
Solo la justicia podría dar la razón a la chica que después de no llegar a un acuerdo con su ex novio en un acto de conciliación, decidió poner una demanda vía contencioso. Hace unos días, el Juzgado número 2 de Andújar, después de llevar a cabo el juicio verbal, sentenció que María Jesús era copropietaria del perro Qilaq, y por lo tanto debía disfrutar de su mascota en meses alternos.
El abogado de la joven declaró: “Habíamos encontrado uno o dos casos parecidos, pero ocurrían ante una demanda de divorcio o con características muy diferentes. De poco nos sirvieron como ejemplo para el juicio, así que tuvimos que actuar como precursores en este ámbito”.
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