Al tener un amigo canino en casa, siempre pensaremos en hacer cosas que mejoren su estilo de vida y su comodidad. Mientras ellos son felices, nosotros lo seremos también y qué mejor que cuidando de su salud y bienestar. Por esta razón este artículo les presta especial atención a sus almohadillas, el cuidado que deberían tener y los beneficios que tiene darles la debida atención.
De seguro tu perro camina, corre y salta por toda tu casa y los lugares que visitan juntos. Ahora bien, así como utilizas zapatos para protegerte del suelo por donde caminas, tu perro tiene las almohadillas. Sin embargo, en ocasiones estas sufren accidentes o llegan a enfermarse y aquí te comentamos como mejorar la situación para tu mascota.
¿Qué son las almohadillas de perros?
Las almohadillas no son más que la parte de las patas de tu perro que están en contacto directo con el suelo por donde camina o cualquier tipo de superficie donde transite el mismo. Comparando el cuerpo canino con el de un ser humano, las almohadillas son el equivalente a la planta de los pies, por lo que cuidarlas asegura una mejor experiencia al andar.
Los perros generalmente tienen en total 4 almohadillas en cada pata, pero solo son capaces de apoyar 3 de ellas. Estas almohadillas se forman por la acumulación de lípidos o grasa, por lo que es normal que esta zona sea elástica y con una consistencia firme que sirve de amortiguación a la hora de caminar, correr o jugar.
Esta zona de la pata de tu perro también está dotada con una alta cantidad de glándulas sudoríparas, lo que beneficia la hidratación de las almohadillas. Además de esto su piel en esta zona tiene una mayor concentración de queratina, lo que hace la almohadilla aun mas dura y resistente a cualquier superficie del suelo.
¿Qué puedo hacer para proteger las almohadillas de mi perro?
La actividad continua hará las almohadillas de tu perro mucho más resistentes, por lo que su cuidado inicia con la necesidad de caminar por diferentes superficies que tiene tu perro, independientemente de su raza o tamaño. Esta necesidad se acopla con la actividad física, por lo que salir a pasear regularmente será una excelente idea.
Otro de los puntos importantes a tener en cuenta en el cuidado de las almohadillas de tu perro es la hidratación. A pesar de las glándulas sudoríparas que suplen esta necesidad, en ocasiones la superficie es tan reseca y dañina que puede causar deshidratación y grietas. El panorama se verá favorecido si tu perro bebe mucha agua y tienes cuidado de donde pisa.
La higiene es un aspecto que no podemos ignorar, mucho menos hablando de las patas de nuestra mascota. Hay razas donde el pelaje crece mucho a través de las almohadillas, por ello cortar y limpiar el mismo evita deformaciones e infecciones a causa del descuido.
En ese mismo orden de ideas, debes cuidar el largo de sus uñas y la higiene de las mismas. Si éstas llegan a crecer excesivamente pueden separar sus dedos y dificultar su andar. En todo caso, para hacerle la vida mucho más feliz a tu perro hazte con un cortaúñas adecuado y con el conocimiento necesario, córtale las uñas periódicamente.
Si no sabes cómo hacer la mayoría de estas cosas, es recomendable que lo lleves a su veterinario. Este debe orientarte acerca de su cuidado, incluyendo esos cuidados adicionales orientados a la raza y tamaño de tu mascota en específico.
Heridas en las almohadillas de mi perro ¿qué debo hacer?
Si tu perro presenta cualquier clase de heridas en sus almohadillas, bien sea leves o graves, es importante que limpies la zona con abundante agua. Si hay algún objeto extraño puede causar una infección que definitivamente deberemos evitar.
Luego deberás aplicar alguna crema antibiótica, para eliminar de una vez por todas cualquier riesgo de infección que pueda tener tu perro. Generalmente hay cremas desinflamatorias que cumplen ambas funciones, dependerá de tus recursos en ese momento.
Por último, antes de llevarlo al veterinario, si se trata de una herida de gravedad, deberás cubrir la zona con una gaza limpia y estéril o una venda correctamente aplicada. Dentro de esta clasificación se incluyen las quemaduras o abrasiones de las almohadillas, que pueden llegar a ser verdaderamente dolorosas para tu perro porque esta zona tiene mucha irrigación sanguínea.
Esta irritación puede causar algunas consecuencias a corto, mediano y largo plazo, por lo que, si tu perro tiene una herida, es mejor tratarla a tiempo. Tu perro te agradecerá que lo lleves cuanto antes al veterinario.
Protectores para almohadillas de perro
Si te das una vuelta por la tienda de mascotas o el supermercado más cercano, de seguro encontrarás muchísimos protectores para las almohadillas de tu perro. Generalmente se tratan de cremas que van a aumentar las barreras de seguridad que naturalmente tiene tu mascota o que van a aliviar los efectos que regularmente tiene la caminata en estas.
Entre los más famosos podemos encontrar cremas con extracto de centella asiática, que tiene un increíble poder antiinflamatorio y cicatrizante, por lo que las heridas no serán un problema mayor.
También encontrarás cremas de origen natural que aconsejan para el cuidado de las almohadillas, dentro de estas destacan la vaselina, la cola de caballo -que además de proteger e hidratar la almohadilla también favorece en la formación de colágeno-, así como la inigualable aloe vera, con todas sus ventajas para el cuidado de la piel.