Nuestros perros son parte de la familia, por ello siempre procuramos hacer lo que esté a nuestro alcance para verlos felices y sanos. En este sentido, uno de esos factores esenciales en los que sólo nosotros podemos ayudar a nuestras mascotas es la alimentación.

Así, siempre podremos elegir entre la comida comercial o diseñar concienzudamente una dieta casera. Veamos lo que debemos tener en cuenta para esta segunda opción.

Reglas de oro para la alimentación casera para perros

Una vez decididos a alimentar a nuestros caninos con comida casera, tendremos que tomar en cuenta una serie de consideraciones importantísimas. Gracias a estas pautas, su salud no se verá afectada negativamente.

Consultar a los expertos

Lo primordial, será contar siempre con el visto bueno de un veterinario o nutricionista canino. El porqué es muy sencillo, los piensos o comida comercial han sido procesados y preparados con el objetivo de cubrir las necesidades nutricionales de los canes, en sus diferentes presentaciones, atendiendo a la raza y edad.

Por otro lado, la comida casera podrá cumplir con este objetivo sólo en la medida en que sea bien diseñada. Es decir, las recetas deben incluir todos los grupos alimenticios.

Estos datos deberán atender a los requerimientos específicos de nuestro perro y sólo un experto nos podrá orientar en cuanto a las cantidades, porciones y combinaciones correctas.  

Complementos

Generalmente, se recomienda la comida casera para recompensas o como complemento. Pero si lo que realmente queremos es que sea la dieta exclusiva de nuestra mascota, deberemos asegurarnos de seguir las recomendaciones anteriores. Parte importante de lo que el veterinario nos pueda sugerir, es que complementemos la alimentación con vitaminas y minerales.

Finalmente, esta regla permite mayor flexibilidad, según sea nuestra preferencia, y es la de cocinar los alimentos. Si bien es cierto que los perros pueden comer alimentos (carnes) crudos sin mayores inconvenientes, se recomienda que los mismos sean cocinados. De esta forma, evitamos que desarrollen algún parásito.

No obstante, si optamos por proporcionarles carnes crudas, entonces asegurémonos de tomar todas las medidas para adquirir alimentos que han seguido los protocolos de higiene y al llegar a casa congelar las piezas por unas horas.

Comida para cada caso

Tal como lo hemos señalado, cada perro tiene necesidades nutricionales diferentes, en especial si se atiende a su edad, raza, tamaño, niveles hormonales (en especial las hembras), entre otros aspectos.

De forma general, podremos atender a las siguientes circunstancias o condiciones:

Una hembra deberá consumir 50% más de su ración habitual para que se encuentre en óptimas condiciones a la hora del parto.

Por otro lado, los cachorros deberán consumir más proteínas y calorías que un perro adulto.

Mientras que, a los adultos, se les debe mantener bajo control la cantidad de calorías. Con ello evitaremos que padezcan de obesidad y todas las complicaciones que trae consigo.

En cuanto a nuestros adultos mayores, requerirán menos calorías, que en sus años de juventud. Siendo recomendable incluir alimentos ricos en antioxidantes.

Alimentos recomendados para perros

Ya conocemos algunos alimentos que resultan peligrosos y dañinos para los perros, ahora veamos aquellos que les caen muy bien. Es importante destacar que, a modo meramente informativo, las recetas podrán incluir los siguientes alimentos. No obstante, hay perritos alérgicos o con alguna condición médica particular, que puede implicar la eliminación de alguno de estos alimentos de su dieta. Por ello remitimos a la regla de oro, siempre consultar al veterinario o nutricionista canino.

Ahora bien, recordemos que gran parte del éxito al preparar comida casera para perros es el equilibrio de la dieta. Siendo ello así, resulta de gran importancia que el menú incluya proteínas de calidad tanto de origen animal como de origen vegetal, grasas, carbohidratos, minerales y vitaminas.

Así encontramos la carne de pollo, pescado y ternera entre las opciones de proteína animal. Mientras que tenemos al maíz, trigo o soja como proteína vegetal. Asimismo, el arroz, la avena y remolacha, además de carbohidratos aportan la fibra necesaria para contribuir con el buen tránsito intestinal.

En cuanto a las vitaminas y minerales, éstas estarán en todos los alimentos, en distintos porcentajes. Sobre este particular, deberemos prestar atención por si es necesario suplementar. De igual manera, no debemos olvidar, las legumbres, huevos y frutas.

Alimentos prohibidos

En este mismo orden de ideas, podremos acudir a los expertos para cerciorarnos de qué alimentos pueden o no ser ingeridos por los perros. Por más que nos derritan el corazón con su mirada suplicante, debemos saber que ellos no pueden procesar algunos alimentos que nosotros sí, por ejemplo, chocolate. Aunque podremos conseguir un listado de estos alimentos, lo mejor será que el veterinario nos indique qué alimentos puede comer o no nuestro perro.

Solo a modo orientativo encontramos que los perros no deben comer, aguacate, chocolate, cebolla, uvas y ajos. De igual forma, debe evitarse la sal y el azúcar.

¿Son muy complicadas las recetas de comida casera para perros?

Esta pregunta es muy válida, pero no hay nada que temer. Las recetas para la comida de canes no son nada complicadas y lo mejor no tomarán mucho tiempo ni esfuerzo en su preparación.

Así que esto no será un problema, la preparación de las recetas por lo general no tomará más de 15 minutos de nuestra ocupada agenda y nuestras mascotas lo agradecerán infinitamente.