El paso del tiempo no perdona y, así como nosotros envejecemos, nuestro querido perro también. Lamentablemente, esta etapa de la vida para nuestros canes llega bastante pronto, por lo que deberemos prepararnos para brindarle una buena calidad de vida.

Por ello, uno de los primeros cambios que debemos hacer para garantizarle una vejez tranquila y saludable, es la alimentación. Conozcamos cómo alimentar correctamente a nuestra macota anciana.

¿Cómo saber que mi perro está viejo?

Lo primero en lo que debemos estar claros, es cuándo nuestro amigo empieza a ser clasificado como un perro anciano, senior, adulto mayor o viejito. Es de destacar que este período puede variar en función de la raza y tamaño de nuestro perro. Por lo general, se puede afirmar que un can de 10 años es un anciano. No obstante, el inicio de esta etapa vital tuvo que haberse iniciado antes.

Existe un consenso en que, los perros de razas pequeñas, al igual que los mestizos son más longevos que los perros grandes y los de raza pura. En este orden de ideas, los pequeños inician el proceso de envejecimiento más tarde que los grandes. Así encontramos que, un perro de raza chica es anciano llegado a los 8 años, uno de raza mediana es un viejito a los 7 años y un can de tamaño grande o gigante a partir de los 6 años.

En todo caso, los signos de envejecimiento también se hacen notar con solo detenernos a observar el comportamiento de nuestro fiel amigo. Por esto, si notamos que nuestra mascota camina más lento, duerme más de lo que solía hacerlo, se desorienta con facilidad o pareciera no escuchar o ver como antes, son noticias de vejez. De todas maneras, el veterinario siempre podrá orientarnos con más certeza.

¿Cómo alimentar a un perro anciano?

Una vez nos cercioremos que nuestro can ha entrado a esta etapa, deben iniciarse los cambios en su nutrición. Es importante, que el veterinario nos oriente, independientemente de si alimentamos a nuestro perro con comida casera o industrial. Esto es así, porque será él quien nos dirá la cantidad y las proporciones nutricionales que requerirá nuestro canino anciano según su raza o condición de salud general.

Ahora bien, nosotros les adelantamos algunos consejos para tener en cuenta y que las recomendaciones del veterinario no los tome por sorpresa.

Alimentación baja en grasa

En la alimentación canina, elementos como la grasa son tan importantes como las proteínas o la fibra. A lo largo de su vida como cachorro y adulto un perro necesita que su alimentación contenga un importante porcentaje de grasa, la cual le dará protección contra climas fríos y un buen aspecto a su pelaje.

Es de recordar que los perros viejos deben mantener un porcentaje de grasa en su alimentación, pero no en la misma proporción que antes. Especialmente, porque su actividad física es mucho menor que en su juventud, por lo que no pueden quemar toda esa energía que le proporciona este grupo alimenticio. Esto traería como consecuencia que nuestro perro viejo aumente de peso.

Tal resultado es contraproducente, ya que aumenta el riesgo de que sufra de diabetes y sus articulaciones sufran daños importantes.

Proteínas de calidad

La vejez viene acompañada de una serie de deterioros completamente previsibles e inevitables. En este sentido, nuestro perro no podrá moverse con la misma agilidad que cuando era un joven ejemplar. Esto se debe básicamente a la pérdida de masa muscular. Así, a los fines de minimizar estos estragos de los años, se recomienda aumentar el porcentaje de proteínas con el que alimentamos a nuestro viejo amigo.

Pero es relevante que esta proteína además sea de la mejor calidad y al mismo tiempo sea fácil de digerir para el sistema digestivo de un perro mayor. Para cumplir con estos requerimientos, muchos expertos invitan a los dueños a alimentar a su perro directamente con proteína animal, bien sea de pollo, cerdo, res o pescado.

Por otro lado, quienes prefieran continuar con la comida industrializada, se debe escoger aquella que brinde una proporción adecuada de proteínas. Por lo general, las marcas de pienso suelen tener una línea exclusiva para perros seniors.

Incluir antioxidantes

El deterioro no es sólo a nivel físico, las habilidades cognitivas de nuestro peludo también se verán afectadas. ¡Sí! ¿Sabían que ellos también pueden padecer de demencia senil? Para evitar o minimizar esta situación, serán nuestros mejores aliados los alimentos ricos en vitamina C, un potente antioxidante que le reportará grandes beneficios al cerebro de nuestro perro abuelito.

Alimentos naturales Vs. Alimentos industrializado

En este aspecto se presentan algunos debates entre los expertos. En este sentido, hay quienes señalan que la mejor alimentación para un perro mayor es la natural, hecha en casa. Principalmente porque estará libre de conservantes y porque estos alimentos industriales contienen muchos más carbohidratos de los que un perro necesita, más aun cuando de ancianos se trata.

Por otra parte, quienes defienden el uso de piensos resaltan que estos alimentos están pensados y diseñados para contribuir de manera equilibrada y completa con la alimentación del can. Por tanto, los alimentos para abuelos tendrán las proporciones indicadas de cada grupo alimenticio, cosa que no se garantiza con la comida casera.

Independientemente de cual elija, lo importante es seguir las recomendaciones del veterinario, y brindarle la mejor calidad de vida posible a ese perrito que durante tantos años nos ha dado su amor y fidelidad.