El Pastor Alemán se caracteriza por ser afectuoso, trabajador nato, excelente guardián, protector de los niños, inteligente y valiente. Los perros de esta raza resaltan porque siguen perfectamente las órdenes de sus amos y son obedientes. El entrenamiento del Pastor alemán es muy importante para su socialización. Este perro, convive perfectamente en hogares que tienen niños pequeños, es bastante cariñoso y protector con ellos. Además, es un excelente perro de trabajo en distintas areas: policía, bomberos, recate, pastor, etc aunque también puede ser criado como pastor alemán de concursos de belleza.
Se destaca por tener un comportamiento perfecto y excelente conducta, es un perro fiel, de salvamento y es capaz de desarrollar diferentes actividades como pastor de vacas y ovejas, es guía, detector de drogas, es un perro de ataque, entre otros. Es un animal lleno de vigor, ágil, enérgico y muy despierto.
Hay varias variedades destacables como son: el pastor alemán de pelo largo o Pastor Alsaciano, el Pastor alemán sable o gris, el pastor alemán gigante.
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Gracias a la fidelidad del Pastor Alemán, es sencillo su desarrollo adecuado con un amo o dueño que sea capaz de brindarle la misma devoción. El Pastor Alemán disfruta de la complacencia de sus dueños. Aunque no es del todo cierto, que el dueño ideal de esta raza sea una persona que esté todo el día en casa, porque para aquellos dueños que trabajan durante el día, pueden reservar el tiempo apropiado para compartir con el can luego de volver a casa del trabajo.
Se debe tener en cuenta el ejercicio del Pastor Alemán, sin olvidar que esta raza requiere de un entorno y espacio amplio donde pueda desenvolverse libremente. El aprendizaje como dueño de un perro de esta raza comienza con instruirte respecto al espacio que requiere. Es un perro de gran tamaño y cargado de energía que para poder funcionar requiere un jardín o si el dueño puede proporcionarle un amplio patio sería lo ideal para esta raza.
Es primordial que el perro reciba un entrenamiento adecuado debido a su afán por complacer y a su naturaleza inteligente, es un verdadero placer instruir a estos canes.
Una de las prioridades del Pastor Alemán es que pueda realizar ejercicio diario, al menos dos veces. Con el ejercicio el perro se mantiene más saludable, feliz y es una buena manera de mantener el lazo afectivo entre amo y mascota. Pueden realizar caminatas extensas, llévalo a la playa a correr, realizar carreras y jugar en el patio trasero.
Cuando hace demasiado calor, el Pastor Alemán es propenso al sobrecalentamiento por lo que procura que se mantenga fresco. Cuando el clima es demasiado cálido, su tazón de agua debe mantenerse lleno y tener sombra donde pueda descansar del calor. Si estas cerca de un río o playa, puedes dar un paseo con el perro para que pueda refrescarse. Durante estos días el perro no debe realizar ejercicio excesivo y que requiera mucha fuerza.
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Debido a que el Pastor Alemán es un perro de gran tamaño, los ovarios de la hembra tienen la capacidad de engendrar mayor cantidad de óvulos y el útero cuenta con mayor espacio para acoger a los cachorros por nacer. Las hembras de esta raza suelen tener numerosas camadas gracias a su enorme tamaño.
Cuando un Pastor Alemán carece de un linaje de pedigrí muy cuidado, tienen camadas con cachorros entre los 7 y 9, pero los perros que tienen linaje de pedigrí pueden parir camadas con 4 y hasta 6 cachorros.
Es fundamental que esto no sea tomado como una norma porque existen distintos factores que intervienen en el momento de la monta, existen casos en los que el número de cachorros de pastor alemán es mayor o menor a los mencionados anteriormente.
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El Pastor Alemán es un perro que puede verse afectado por algunos de los problemas de salud descritos a continuación:
– Displasia de cadera: es una de las afecciones más recurrentes en esta y otras razas de perros, es un tipo de padecimiento congénito y hereditario que causa daño en la zona articular de la cadera y causa ciertas variaciones anatómicas que disminuyen las funciones normales del perro.
– Panosteitis: es otra de las enfermedades que afectan al Pastor Alemán y se caracteriza por el crecimiento, formación y la inflamación exagerada del hueso que rodea las articulaciones, causando una mala coordinación.
– Pannus corneal: este padecimiento canino se produce por la hinchazón de la córnea y puede originar la ceguera del perro.
– Síndrome de cauda quina: en esta enfermedad se producen signos neurólgicos producto de la compresión nerviosa de la espina en la zona lumbosacra del Pastor Alemán.